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10 nov 2007

INCIDENTE CON UN OSO (Ribagorza)

Inquietud entre los ganaderos tras un incidente de un cazador con un oso.
El colectivo de ganaderos de Ribagorza ha mostrado inquietud tras conocer un incidente ocurrido el pasado domingo en el valle de Arán, cuando un oso echó a correr en dirección a un cazador, que tuvo que salir también corriendo y resguardarse del animal, y que además resultó herido al sufrir una caída. El presidente de la Asociación de Ganaderos “Norriberésera” va a pedir una entrevista con la responsable del seguimiento del oso en la Ribagorza.
GRAUS.- El presidente de la Asociación de Ganaderos “Norriberésera” y representante de los profesionales ribagorzanos del sector en la Mesa de Trabajo del Oso, Carlos Pallás, anunció ayer que pedirá una entrevista con la técnico responsable del seguimiento del oso en Ribagorza ante el incidente ocurrido en el valle de Arán el pasado domingo, por el que un cazador resultó herido al escapar de un oso durante una batida.Pallás anunció, asimismo, que el ganadero de Anciles que perdió cinco vacas en un incidente en el valle de Estós causado presumiblemente por un oso en los días previos al Pilar podría ser indemnizado. El diario El Segre recogía en su edición del pasado martes un suceso ocurrido el domingo en el valle de Arán, en una zona conocida como la Era de la Bordeta en el municipio de Arres. Al parecer, según las mismas fuentes, un oso echó a correr hacia un cazador que permanecía en su puesto durante una batida de caza. El joven César Estop, de 24 años y vecino de Les, salió corriendo ante la actitud del plantígrado, al parecer, un oso adulto que, añade el joven en el rotativo catalán, “se detuvo un momento, olisqueó a su alrededor, volvió la cabeza en dirección a mí y empezó a correr. Yo -añadió- salí corriendo cuando lo tenía a unos 10 metros”. Estop sufrió heridas en una pierna, un brazo y hematomas en la cabeza como consecuencia de una caída de unos dos metros de altura. Finalmente, el joven quedó agarrado a un árbol y resguardado en una cavidad que formaba el tronco y una pared de pieza, si bien todavía al alcance del oso. Un compañero de cacería apareció en ese instante y amenazó con disparar al oso que gruñía todavía a Estop. El oso, que estaba entonces a varios centímetros del joven, huyó poco después.

(Diario del AltoAragon-Elena Fortuño)

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